Leche con chocolate, sin galletas...

Siento frío y jalo mi cobija que esta hecha un rollo sobre mis pies, quiero dormir un poco mas, anoche me acosté ya tarde, intento acomodarme y cubrirme, soy mala para eso de generar calor y retenerlo, cierro nuevamente los ojos e intento conciliar el sueño pero…son casi las siete, la licuadora de Cristina mi vecina esta sonando, licuado a estas horas? Pues claro son casi las siete y la vida comienza, me levanto por que tengo que. Amanece, y amanece nublado, busco por la ventana los primeros rayos de sol pero no acuden a mi vista, hace frió, mis viejas pantuflas y mi suéter feo, si, eso siempre me anima en mañanas como esta. Abro la puerta para echar un primer vistazo, allá abajo el patio esta mojado, no hay vecinos saliendo aun es temprano, saco la basura y la acomodo, no tardan en pasar por ella, la vida comienza pero no pareciera, hay mucho silencio, mucha calma.

Miro hacia arriba y las nubes se notan gordas, panzonas, como hembras preñadas, oscuras y cargadas de agua, prontas a librarse de esa carga, se les nota que buscan de nuevo un vientre plano.
Acaso será cierto que en este mundo todo es vanidad.
El espejo me llama es inevitable…si, todo es vanidad, analizo mi piel, mi cuerpo, son los mismos de ayer pero tan distintos, un día no es igual a otro, yo tampoco soy la misma, esta de hoy no soy la yo de ayer, ni la de anteayer, mas bien soy…pero no soy. Hoy soy esta que se mira y se remira, intento reconocer mi rostro y este cuerpo pero, cuesta, aun me cuesta, durante mucho tiempo vi un rostro y un cuerpo diferentes y no ha sido fácil dejarlos atrás, he intentado muchas cosas para dejarlos en el camino, meterme en otra calle y mandarlos a ellos por otra, perderlos, pero se vienen siempre, me huelen, me ganan, se adelantan y saben por que otra calle voy a salir. La tetera que chilla berrinchudamente me llama, es hora de leche caliente con chocolate, galletas, no hoy no, te digo…me persiguen, se vienen. Suena " Lilium " en mi celular, si, cántame de nuevo esa triste tonada de cajita musical, suena solo para mi dulce Lilium, es mamà –No mà no quiero ir a correr ya sabes que a mi esas cosas no se me dan, bueno, gracias. Mi madre, mi rayito de luz, no la he visto desde el viernes, quizá a la noche, quizá, pero si llueve no, si sigue el frío no, otro día, siempre hay tiempo (y no lo hay). Papà siempre decía –Seré feliz si llego a los quince años de Grecia. Pero…no llego. Yo me decía que tendría mi primer bebe a los veinte, yo no quiero que me coma el tiempo. Por poco me agarra la muerte pero la engañe, quiero ganarle al tiempo desde siempre. Hasta ahora aquí sigo, y si la muerte regresa por mi, soy capaz de morderle una oreja como Tyson hasta arrancarsela y escupírsela, no me llevaras ¡
No me ganaras le gritaré sonriendo con su sangre escurriéndome en la boca.
Leche con chocolate sin doble de azúcar ni galletas, te digo…todo es vanidad.
05 Agosto, 2009
Lilymeth Mena.